Tratamiento para el Trastorno Obsesivo Compulsivo en Bilbao y Bizkaia

01 Qué es el TOC o Trastorno Obsesivo Compulsivo

El Trastorno Obsesivo Compulsivo está clasificado dentro de los trastornos de Ansiedad.

La característica principal del TOC es la presencia de obsesiones y/o compulsiones recurrentes que, generalmente provocan en quien lo padece, pérdidas de tiempo, deterioro en la actividad general, aislamiento social y un gran malestar psicológico.

Las Obsesiones pueden manifestarse en modo de imágenes, pensamientos o impulsos.

02 Una persona con TOC

La persona con Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) lo suele describir como pensamientos muy recurrentes, involuntarios, que aparecen sin avisar y que además, se ve incapaz de poder quitárselos de la cabeza. Aunque con el tiempo, la persona aprende a detectar los estímulos que provocan su aparición.

Los contenidos de las obsesiones más frecuentes suelen versar sobre temas de tipo sexual, religioso, daño o agresión a terceros, contaminación…

La persona, cuando está tranquila, es capaz de razonar que lo que le ocurre no tiene sentido, que son ideas absurdas, que nada tienen que ver con sus principios, valores… pero cuando le vienen, no puede evitar horrorizarse, angustiarse y temer unas consecuencias graves.

Por ello, es muy habitual que estas personas tengan miedo a la locura.

03 Obsesiones y Compulsiones

Conforme van evolucionando las obsesiones, la persona va perdiendo fuerza para poder razonar que todo lo que le viene es absurdo porque el poder de la duda va ganando terreno.

Por esta razón, es frecuente que terminen por implicar a personas de su entorno más próximo buscando la confirmación de que eso que piensan no es real y por tanto, no va a pasar nada.

Debido a los altos niveles de ansiedad que acompañan a las obsesiones, la persona, va a terminar por desarrollar una serie de acciones cuya finalidad va a ser el intentar reducir o eliminar ese malestar psicológico. Esto es lo que se llama compulsión.

Se trata de comportamientos repetitivos, ilógicos, que cumplen con ciertas reglas o patrones rígidos cuando se llevan a cabo y cuya finalidad persigue poder reducir el malestar y/o evitar la consecuencia temida.

Pueden ser mentales: como rezar, contar, repetir palabras en silencio, etc. o motoras como por ejemplo: lavarse las manos, pisar baldosas, orden de objetos, comprobaciones…

Con el tiempo, las compulsiones van perdiendo su eficacia, éstas se van volviendo más exigentes e inefectivas para la persona ya que, necesita hacerlas más número de veces porque ese efecto tranquilizador que antes tenían va perdiendo intensidad y duración.

Debido a esto, la persona comienza a desarrollar conductas de evitación como medida de supervivencia, intenta evitar exponerse a todo aquello que piensa que le va a provocar la obsesión para dejar de sufrir, aunque con el tiempo compruebe que tampoco le funciona.

04 Tipos de Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)

  1. Verificación o comprobación

    La persona efectúa comprobaciones excesivas con el fin de evitar que ocurra un accidente, robo, incendio, etc., por ejemplo; comprobar enchufes, aparatos eléctricos, gas, puertas… El número de comprobaciones va a ir aumentando con el tiempo porque le entrarán dudas de si lo ha hecho correctamente o no. Además, terminan por implicar en esas comprobaciones a las personas que conviven con ell@s, preguntándoles si lo han hecho bien, pidiéndoles que estén presentes cuando realizan la comprobación…

  2. Limpieza

    El contenido de la obsesión reside en su miedo a poder contraer una enfermedad grave por el contacto de algún objeto o situación (gérmenes, productos químicos, secreciones corporales,…). Para evitar eso, desarrollan una serie de rituales o compulsiones, tales como; lavarse las manos de forma repetitiva y durante un tiempo desproporcionado, duchas prolongadas, limpiezas excesivas y prolongadas de la casa… Al final, terminan por evitar exponerse a esos estímulos como por ejemplo; no invitar a gente a su casa, cerrar determinadas habitaciones para que nadie entre en ellas, poner lavadoras separando la ropa que considera contaminada…

  3. Repetición

    Realizan acciones repetitivas con el objeto de poder evitar posibles catástrofes, aunque no haya una conexión lógica entre la obsesión y la compulsión. Por ejemplo, la idea de impedir la muerte de un ser querido le lleva a entrar y salir por la misma puerta un numero X de veces, hasta que desaparezca esa imagen o idea.

  4. Orden

    La persona exige que las cosas estén colocadas siguiendo una pauta concreta y rígida. Por ejemplo; hacer la cama sin ninguna arruga, las cosas tienen su lugar concreto y si se mueve algo, vuelven a recolocar el objeto. Dedican mucho tiempo a ese fin y se sienten muy molestos cuando alguien ha recolocado algo de manera diferente. Este tipo de comportamiento no suele estar sujeto a un miedo de que ocurra un desastre, responde más a una necesidad de autocontrol, de perfección.

  5. Acumulación

    La persona va recopilando objetos innecesarios que luego es incapaz de tirar porque piensa que lo puede necesitar en un futuro. El tipo de objetos pueden ser: trozos de papel, periódicos, libros…

  6. Ritualización mental

    Recurren a pensamientos o imágenes de forma repetitiva con el objetivo de reducir la ansiedad que le provoca una obsesión. Los rituales más comunes son rezar, contar y repetir ciertas palabras o frases. Por ejemplo: una persona que repite varias veces el número 10 para eludir la mala suerte.

  7. Obsesivo puro

    Experimentan pensamientos reiterativos y negativos que llegan a ser generalmente intolerables para la persona obsesiva por su contenido. No entienden por qué les vienen esa clase de pensamientos o imágenes ya que nada tienen que ver con sus creencias o valores. Este tipo de TOC no presenta comportamientos reiterativos como comprobar enchufes, lavarse las manos…

Trastorno obsesivo compulsivo bilbao

05 Tratamiento para el Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)

Estamos especializados en TOC en Bilbao. Nuestros programas de intervención se ajustan a las necesidades de cada persona, donde además, si es necesario, se traslada la sesión al lugar donde tengan lugar las conductas compulsivas para poder ofrecer un acompañamiento en los momentos más críticos del trastorno. Por otro lado, también se ofrece un asesoramiento a la familia para que sepan cómo comportarse ante el problema.

Las técnicas de intervención que se aplican en la Terapia Cognitivo Conductual son consideradas en la actualidad como las más eficaces por ello, es el tipo de terapia que se recomienda en los casos de Trastorno Obsesivo-Compulsivo.

Este tipo de tratamiento está enfocado por una parte a entrenar a la persona para que pueda manejar los pensamientos obsesivos y por otra, a que elimine las compulsiones.

Para ello, se le va a enseñar una serie de ejercicios que le van a ayudar a poder eliminar o reducir significativamente las obsesiones y su miedo a que vuelvan a aparecer y, de forma paralela, otras herramientas para que, de forma gradual, vaya eliminando las compulsiones y compruebe que no las necesita para reducir o eliminar la ansiedad.

Este aprendizaje tiene un efecto preventivo debido a que la persona lo interioriza dentro de su repertorio de conductas.

El tratamiento farmacológico, aunque suele ser compatible, es insuficiente por sí solo porque es necesario intervenir en las conductas desadaptadas que la persona ha ido desarrollando desde el inicio del trastorno. Además, sus efectos terapéuticos desaparecen en el momento en el que se abandona la medicación.

Estíbaliz Ruiloba es psicóloga especialista en el Trastorno Obsesivo Compulsivo. Durante dos años, adquirió su formación sobre este trastorno en la reconocida Unidad de Psiquiatría del Hospital de Bellvitge (Barcelona).