El TOC de Superstición
Para comenzar a explicar este tipo de trastorno, es importante matizar que una persona puede ser supersticiosa y, sin embargo, no desarrollar este tipo de trastorno. Una persona supersticiosa realiza determinadas conductas de manera puntual, como puede ser; tocar madera, evitar realizar cosas importantes en los días 13, etc., pero dicho comportamiento no condiciona su vida y el nivel de ansiedad que le genera es mucho menor.
El TOC de superstición es un subtipo de TOC en el que, la persona que lo padece, se ve en la necesidad de realizar y/o evitar una conducta con el fin de poder evitar una consecuencia negativa. Piensa que, si no hace caso a lo que le dicta el pensamiento, puede sucederle algo malo a ella o a algún ser querido.
En el fondo, es consciente de que se trata de un pensamiento irracional y que, por lo tanto, no tiene sentido, pero cuando aparece, no puede evitar hacerle caso y obedecer a lo que le dicta la idea intrusiva para que no ocurra aquello que teme. Aquí es cuando la persona comienza a realizar las compulsiones.
Las compulsiones pueden ser mentales y/o motoras. Se trata de una serie de actos que van asociadas a obsesiones concretas, se realizan de manera estereotipada y su función va dirigida a reducir la ansiedad.
La persona convierte las compulsiones en su mecanismo de afrontamiento, es decir, va a poner en marcha una serie de «estrategias» de manera intencionada con el objetivo de poder manejar la obsesión y no sentirse invadido por ella ni por sufrimiento que le provoca.
El problema es que las compulsiones van a perder «efectividad» con el tiempo, esa es la trampa del TOC. Al principio, como la persona comprueba que le relaja, empieza a recurrir a ella cada vez que le invade la obsesión hasta el punto de convertirla en una necesidad. Cuando esto sucede, la compulsión se va volviendo más exigente, menos efectiva y acaba condicionando completamente la vida de la persona.
TRATAMIENTO PARA EL TOC DE SUPERSTICIÓN
Este tipo de trastorno Obsesivo tiene un tratamiento en el que se suele combinar la terapia farmacológica con la intervención Cognitivo-Conductual. Los antidepresivos ayudan a reducir la intensidad de las obsesiones, pero si la persona no aprende a romper el círculo vicioso que existe entre la obsesión y la compulsión, seguirá reforzando al TOC.
Estíbaliz Ruiloba es Psicóloga Especialista en Psicología Clínica con amplia experiencia en el TOC y realiza una consulta informativa gratuita donde puedes recibir información de una manera personalizada. Si estás interesad@, puedes solicitarla en el teléfono 944 160 206 o a través de nuestro formulario de contacto.